CONTRATOS: UN VÍNCULO LEGAL QUE RESISTE AL PASO DEL TIEMPO

Contratos

Los contratos son pilares fundamentales en la era moderna. A lo largo de la historia, han evolucionado y adaptado a las necesidades cambiantes de las sociedades. A continuación te explicamos qué son los contratos y cómo han influido en la forma en que interactuamos en el ámbito legal.

¿Qué es un Contrato?

En esencia, un contrato es un acuerdo de voluntades por el cual se crean y transfieren tanto derechos como obligaciones. Puede ser escrito u oral, pero para garantizar su validez y ejecución, la mayoría de las autoridades requieren que los contratos importantes sean documentados por escrito.

Historia de los contratos.

En la Antigüedad:

En civilizaciones antiguas como la babilónica y la romana, se utilizaban acuerdos escritos para regular transacciones comerciales y disputas. Estos primeros contratos sentaron las bases para la formalización de tratados legales.

Edad Media y Feudalismo:

Durante la Edad Media, los contratos adquirieron mayor importancia en el sistema feudal, ya que en este lapso se establecieron diferentes tipos, como arrendamiento, acuerdos de servidumbre y comerciales que regulaban el intercambio de bienes y servicios.

Era Moderna y Revolución Industrial:

Con el surgimiento del comercio internacional y la Revolución Industrial, los contratos se volvieron más complejos y detallados. Surgieron regulaciones legales más rigurosas para proteger los derechos de las partes involucradas.

Siglo XX y globalización:

En el siglo XX, con la creciente globalización y la dificultad de los negocios internacionales, los contratos se volvieron aún más sofisticados. Se desarrollaron leyes y convenciones internacionales para regular acuerdos transfronterizos.

Tipos comunes de contratos.

Contrato de mutuo: es un contrato por el cual el mutuante se obliga a transferir la propiedad de una suma de dinero o de otros bienes fungibles al mutuario, quien se obliga a devolver otro tanto de la misma especie y calidad.

Contrato de arrendamiento: aquel contrato por virtud del cual, las dos partes contratantes se obligan recíprocamente; una de ellas, denominada arrendador, a permitir el uso o goce temporal de un bien; y la otra, llamada arrendatario, a pagar por ese uso o goce, un precio cierto. 

Contrato de compraventa: es un contrato por virtud del cual una persona transfiere a otra la propiedad de un bien, a cambio de un precio cierto y en dinero.

Contrato de depósito: es un contrato por el cual el depositario recibe del depositante un bien, mueble o inmueble, que aquél le confía y se obliga a guardarlo para restituirlo cuando lo pida el depositante. 

Contrato de empleo: es aquel por virtud del cual una persona se obliga a prestar a otra un trabajo personal subordinado, mediante el pago de un salario.

Contrato de mandato: es en el que una persona llamada mandante otorga a otra denominada mandatario, la facultad de realizar por el otorgante un acto jurídico. 

Contrato de préstamo: es un contrato por el cual el mutuante se obliga a transferir la propiedad de una suma de dinero o de otros bienes fungibles al mutuario, quien se obliga a devolver otro tanto de la misma especie y calidad.

Contrato de prestación de servicios técnicos o profesionales: es aquél por medio del cual el prestador se obliga a proporcionar en beneficio del cliente o prestatario determinados servicios que requieren de una preparación técnica o profesional.

Contrato de obra a precio alzado: es a través del cual una persona llamada empresario se obliga a dirigir y realizar una obra con materiales propios, asumiendo el riesgo de su realización a cambio de una remuneración previamente determinada. 

Contrato de transporte: se trata de un acuerdo de voluntades entre una persona llamada porteador que se obliga a transportar, bajo su inmediata dirección o la de sus dependientes, por tierra, por agua o por aire, a personas, animales, mercaderías o cualesquiera otros bienes, y otra persona llamada pasajero o cargador que utiliza el transporte para sí mismo o para trasladar bienes, a cambio del pago de una cantidad cierta y en dinero.

Contrato de hospedaje: aquél por medio del cual una persona llamada hotelero se compromete a brindar alojamiento por un tiempo determinado a otra persona llamada huésped.

Los contratos son una herramienta esencial en la sociedad actual, formando la base de transacciones comerciales, relaciones laborales y más. Su evolución a lo largo de la historia refleja la adaptabilidad del sistema legal a las cambiantes dinámicas sociales y económicas. Con un entendimiento sólido de los contratos, podemos interactuar en el mundo moderno con confianza y seguridad.

Si necesitas asesoría legal sobre los contratos, su elaboración o inclusive la terminación, no dudes en contactarnos, nuestros abogados están listos para atenderte y dar seguimiento a cada caso en específico.